 | | PRÓLOGO |
“Para alcanzar la verdad es necesario, una vez en la vida, desprenderse de todas las ideas recibidas y reconstruir de nuevo, y desde los cimientos, todo nuestro sistema de conocimientos” (Descartes)
“Gestiona los problemas; no aceptes nada como un artículo de fe, busca las ideas claras y distintas,
confía en tí mismo” (Descartes)
Origen
Este obra es una divulgación, ampliación y generalización de la Tesis Doctoral “MENTAL, un Lenguaje Genérico de Especificación de Paradigma Semántico”, presentada el 8 de Mayo de 2003 en la Facultad de Informática de la Universidad Politécnica de Madrid.
Pero la historia comienza mucho antes y tuvo varias fases:
- Cuando empecé la tesis, el tema que elegí fue la Programación Orienta a Objetos (POO), tema que por entonces estaba (y lo sigue estando) muy en boga. El paradigma de los objetos aparentemente prometía ser el paradigma de programación “definitivo”.
- Tras un periodo relativamente corto, me di cuenta de que el paradigma POO no era universal, que era un paradigma de programación más (como el paradigma imperativo, el funcional, el lógico y el relacional). Fue entonces cuando me planteé el diseño de un lenguaje de programación universal que permitiera expresar todos los paradigmas de programación posibles: los clásicos y otros de aparición más reciente como la programación orientada a aspectos, a eventos, a agentes, a restricciones, etc. Durante mi vida profesional he tenido que aprender multitud de lenguajes informáticos diferentes. La idea de un lenguaje de programación universal era un proyecto que, de cumplirlo, tendría enorme trascendencia porque afectaría al fundamento de la informática.
- Inicié entonces un periodo de reflexión, en busca de un conjunto mínimo de conceptos que fundamentaran la programación de ordenadores. Estos conceptos deberían ser simples, no descomponibles en otros conceptos y genéricos o universales. También deberían poseer la máxima flexibilidad combinatoria para expresar nuevos conceptos, así como que facilitaran la creatividad.
- El resultado de esa búsqueda, cristalizó en un lenguaje al que denominé “MENTAL”, por ser esencialmente un lenguaje de la mente y de la conciencia basado en un conjunto de primitivas semánticas universales ortogonales (independientes entre sí) y que podían considerarse como “dimensiones semánticas”. Este lenguaje representaba un paradigma de programación universal, capaz de expresar todos los paradigmas de programación particulares.
- Al ser estas primitivas de supremo nivel de abstracción conceptual, descubrí que también eran aplicables a la matemática. Que eran, además de un lenguaje informático, un lenguaje matemático y que constituían una nueva fundamentación común de la matemática y de la informática. Se diluía, en suma, la frontera entre estas dos ciencias.
La matemática carece de fundamentos sólidos desde 1931, cuando apareció el teorema de incompletud de Gödel. Y la informática se ha apoyado siempre en la matemática.
- Posteriormente intuí que las primitivas semánticas universales se podían considerar arquetipos primarios (o arquetipos de la conciencia) al unir aspectos opuestos o duales: la semántica y la sintaxis, cualidad y cantidad, simplicidad y complejidad, teoría y práctica, lenguaje y metalenguaje, lo descriptivo y lo operativo, lo genérico y lo específico, lo real y lo imaginario, lo finito y lo infinito, lo continuo y lo discontinuo, lo objetivo y lo subjetivo (mundo interno y mundo externo), etc. De esta forma, el lenguaje adquiría una dimensión transcendental: como lenguaje de la conciencia.
- También descubrí que las primitivas semánticas universales eran categorías filosóficas, y que guardaban ciertas analogías principalmente con las propuestas por Aristóteles y Kant. Pero, al contrario que las categorías filosóficas tradicionales, las categorías filosóficas de MENTAL constituyen un lenguaje, pues pueden combinarse entre sí sin restricciones.
- También me di cuenta que MENTAL constituía un fundamento universal de las ciencias formales (las ciencias de tipo racional, sistemático y coherente) como matemática, lógica, informática, inteligencia artificial, sistémica, etc. Una ciencia no puede fundamentarse en sí misma; sus fundamentos deben buscarse en un nivel superior (meta).
- También descubrí que MENTAL, además de ser un lenguaje universal, era la gramática universal buscada por Chomsky, una gramática innata presente en todos los seres humanos. Y que también era un modelo de la mente, o más bien un metamodelo de la mente porque no es un modelo concreto.
- Posteriormente tomé conciencia de que MENTAL, por su carácter profundo, ofrecía un punto de vista privilegiado que permitía resolver, simplificar o aclarar muchos problemas de las ciencias formales, e incluso de la filosofía y la psicología.
- Finalmente, descubrí que MENTAL era un modelo universal y que representaba “la Carta Magna de los mundos posibles”, es decir, una forma unificada, privilegiada y trascendental de ver todo, incluyendo el mundo real como caso particular. En definitiva, que MENTAL representa a los conceptos de mayor nivel de abstracción presentes necesariamente en todos los mundos posibles.
En definitiva, MENTAL es el resultado de una evolución, basada inicialmente en unos conceptos muy simples y que me han conducido, cual hilo de Ariadna, a un descubrimiento trascendental, al Minotauro, al poder que reside en lo profundo.
MENTAL es, efectivamente, un lenguaje. Pero no es un lenguaje más. Es un lenguaje madre, un lenguaje universal que no tiene gramática formal o sintáctica (superficial), pues su gramática es semántica (profunda) y, por lo tanto, inexpresable. De este lenguaje surgen todos los posibles lenguajes particulares.
La tesis original ha sido mejorada, manteniendo su espíritu y filosofía, en varios aspectos:
- Se ha depurado el lenguaje MENTAL, eliminándose complejidades innecesarias, siempre buscando la máxima simplicidad posible.
- Se han añadido nuevas aplicaciones, tanto en matemática (teoría de las categorías, álgebra geométrica, álgebra vectorial, etc.) como en informática (nuevos paradigmas de programación, sistema operativo, web semántica, etc.). De hecho, esta obra puede considerarse como una reescritura, desde nuevos fundamentos, de la matemática y la informática.
- También se han incluido nuevos campos de aplicación como inteligencia artificial, sistémica, cibernética, robótica, etc.
- Se han incluido las propiedades universalistas de MENTAL como: lenguaje ideal, fractal, bootstrap, simbólico, local, multidimensional, transdisciplinario, etc.
- Finalmente se han incluido comparaciones con otros sistemas universalistas que han aparecido a lo largo de la historia.
Motivación
En la concepción de MENTAL han intervenido varios factores:
- En primer lugar, mi formación como físico teórico. La física busca la unificación conceptual a través de un conjunto mínimo de leyes que permitan explicar la diversidad de los fenómenos de la naturaleza. En este sentido, la física es la más universal de las ciencias naturales. Me ha inspirado especialmente la llamada “nueva física”, es decir, los retos conceptuales de la mecánica cuántica y de la teoría de la relatividad. Un aspecto clave es el de dimensión presente en la teoría de cuerdas de la física cuántica y en la teoría de la relatividad, pues cuando se consideran dimensiones, las leyes físicas se simplifican. Análogamente, las “dimensiones” de MENTAL hacen simples las leyes mentales.
MENTAL ha sido concebido animado por la búsqueda de la máxima simplicidad conceptual posible. Tengo la convicción de que “lo que no es simple está mal concebido” y que tras lo aparentemente complejo se esconde una esencia que es necesariamente simple. Me identifico plenamente con Gregory Chaitin cuando afirma: “No estoy interesado en ideas complicadas. Solo estoy interesado en ideas fundamentales”. Y añado: estas ideas fundamentales tienen que ser forzosamente simples.
- En segundo lugar, mi experiencia profesional como informático. Durante muchos años he sufrido los inconvenientes y limitaciones de los lenguajes de programación: su diversidad, su complejidad y su gap semántico, es decir, la brecha existente entre la forma humana de pensar y el lenguaje de las máquinas. Ello me ha motivado en la búsqueda de un lenguaje simple, humanista y universal.
- En tercer lugar, mi interés por el tema de la conciencia, en especial el papel desempeñado por los dos hemisferios cerebrales, para lograr una conciencia unificada, en donde lo particular (hemisferio izquierdo) se fundamente en lo general o universal (hemisferio derecho). En este sentido se enlaza con los paradigmas de tipo universalista como el holográfico y el fractal, considerados los paradigmas de la “nueva era”. Y esta nueva era necesita un lenguaje universal y un paradigma universal.
Estructura de la obra
- La obra emula a todas las tesis, que comienzan por un resumen (abstract). En este caso, hay dos resúmenes diferenciados: un “Resumen General e la Obra” y un “Resumen del Lenguaje”. El lector debe empezar por estos dos capítulos, que le darán una visión general, antes de abordar el contenido de la obra.
- La sección “Problemática” describe los principales problemas relativos a la matemática, la lógica, la informática, la lingüística, la física y la vida, así como el problema de la conciencia.
- La sección “Fundamentos” describe los principios universales que fundamentan la realidad: el principio de causalidad descendente, el principio de dualidad, el principio dialógico y el principio de economía, así como la conciencia como fundamento universal y como nuevo paradigma de la ciencia. También incluye tres sistemas universalistas: el modelo de las primitivas semánticas universales, los arquetipos primarios y las categorías filosóficas.
- La sección “Lenguaje MENTAL” expone este lenguaje como solución a la problemática expuesta anteriormente. Incluye una descripción de las primitivas, las derivadas, así como las diferentes expresiones y técnicas.
- La sección “Aplicaciones”, es la relativa a aplicaciones en diferentes dominios: matemática, lógica, informática, inteligencia artificial, cibernética, sistémica, etc. Se incluyen las más representativas. Realmente habría que reescribir todas las ciencias formales desde el punto de vista semántico-lingüístico aportado por MENTAL.
- La sección “Propiedades” describe las diferentes propiedades o aspectos universalistas de MENTAL.
- La sección “Unión de Opuestos”, describe los pares de características opuestas o duales del lenguaje.
- La sección “Comparaciones” compara MENTAL con diferentes propuestas de sistemas universalistas presentados a lo largo de la historia.
- La sección “Apéndice” incluye algunos temas referenciados en las secciones anteriores.
Cada capítulo puede incluir:
- Adenda.
Son contenidos adicionales, de tipo secundario o complementario.
- Bibliografía.
Dada la diversidad de temas tratados, se incluye bibliografía en cada capítulo, que se compone de referencias bibliográficas asociadas al texto (especificadas entre corchetes) y de bibliografía recomendada. Los corchetes también se usan para hacer referencia a otras partes del texto. Así que los corchetes indican referencias, tanto internas como externas. La bibliografía de Internet (“webgrafía”) normalmente no incluye las direcciones de los documentos web (a menos que se trate de la página principal de un sitio web), porque es frecuente que cambien, por lo que es preferible localizarlos a partir del titulo y/o autor por medio de un buscador.
Esta obra tiene carácter didáctico. El primero que ha aprendido ha sido el propio autor. Al escribir se produce un extraordinario proceso de feedback que permite aclarar los conocimientos y que produce una elevación de la consciencia. Algunas citas:
“No hay mejor forma de aprender sobre cualquier cosa que escribir un libro sobre ello” (Martin Gardner).
“Cuando me interesa saber algo que ignoro decido escribir un libro sobre ello” (José Antonio Marina).
“Escribir es la manera más profunda de conocer la vida” (Francisco Umbral).
Desde el punto de vista didáctico, la obra tiene un contenido modular y altamente estructurado, incluido este Prólogo. Además de la estructura jerárquica habitual para los diferentes apartados, los contenidos de los mismos hacen uso frecuentemente de listas (numeradas o no, según los casos) para indicar propiedades, atributos, aspectos o características. Todo ello con el fin de presentar de la forma más simple y clara posible los conceptos, y para facilitar su lectura y comprensión.
Frente al estilo literario o lineal, el estilo estructurado presenta grandes ventajas:
- Permite aislar o diferenciar conceptos o ideas, poniéndolas al descubierto, sacarlas a la luz. El estilo literario las oscurece, las entierra, las oculta dentro de un texto continuo.
- Es más didáctico, más visual, más fácil de captar y digerir al ofrecerse en “píldoras”.
- Para el autor es más fácil al escribir. Y para el lector es más fácil de leer.
- Permite localizar los contenidos más fácilmente.
- Nos acercan a la conciencia, pues la conciencia es orden.
- Armoniza los dos modos de conciencia: el del hemisferio izquierdo (lineal) y del hemisferio derecho (visual, global).
- Favorece la creatividad, que es un proceso discontinuo, de “saltos conceptuales” o de conciencia.
Mandalas
Cada capítulo de la obra incluye en su cabecera un mandala, que tiene una función que va más allá de la mera estética. Adicionalmente, se han incluido imágenes que evocan universalidad, totalidad y conciencia como unión de opuestos o duales, especialmente fractales y símbolos.
Un mandala es una figura de simetría circular que simboliza o representa el universo, la totalidad y la unidad interna y externa, en donde destaca el centro, que simboliza la fuente (inmanifiesta) de todo lo que existe (lo manifiesto). Los mandalas son una vía para conectar con lo universal, con la totalidad y así aproximarnos a la consciencia de la unidad esencial de todas las cosas. Los mandalas activan, al contemplarse, el lado derecho del cerebro, elevan la consciencia, nos conectan con lo profundo de nuestro ser, con la unidad, la totalidad, lo atemporal, donde no hay fronteras. Los mandalas son realmente puertas a estados superiores de consciencia.
Los mandalas de la obra están realizados mediante símbolos elementales y universales (círculo, cuadrado, polígono estrellado, etc.). Muchos mandalas tienen estructura fractal. Un fractal es una figura en la que un patrón gráfico se repite recursivamente en cada uno de los niveles. Los mandalas simbólicos y fractales tienen aún más fuerza, pues conectan con lo interior y lo exterior, pues mente y naturaleza tienen estructura fractal.
Todos los mandalas de la obra están realizados con el mismo programa, un programa que es simple y parametrizado, en donde cada parámetro representa una dimensión o grado de libertad. Cada mandala corresponde a unos valores concretos de los parámetros. Dada la infinidad de formas que pueden generarse, el programa es una metáfora perfecta de MENTAL, es decir, la combinación de unos pocos patrones básicos simples (arquetipos geométricos) producen una gran diversidad y complejidad de formas. Además, MENTAL es un lenguaje fractal.
El proceso de generación de mandalas es la búsqueda de la belleza, el orden, la armonía, la sintonía con la totalidad y la unidad. Es una búsqueda de la conciencia a través de la geometría, que es la ciencia que une mente y naturaleza. El programa de generación de mandalas se puede considerar como una auténtica herramienta de la conciencia.
Además, los mandalas introducen un factor de equilibrio entre texto (analítico) e imagen (sintético), es decir, convergen los dos modos de conciencia. Y los mandalas sirven para recordarnos permanentemente que MENTAL es un lenguaje universal, de la totalidad, de la conciencia, de lo profundo.
Prerequisitos
Para entender el contenido de la obra basta una formación general en matemáticas y conocimientos básicos del mundo de los ordenadores, en especial lo que significa un lenguaje de programación.
Acceso al contenido
La obra ha resultado quizás excesivamente extensa, casi una enciclopedia. Resulta paradójico que un lenguaje simple como MENTAL, que se puede describir en pocas páginas, necesite un desarrollo tan grande. Esto se justifica por la gran diversidad de aplicaciones incluidas para verificar la universalidad del lenguaje, y a sus enormes repercusiones filosóficas y psicológicas. La obra auna las características de libro y enciclopedia, de libro de texto y ensayo, así como obra técnica y filosófica.
La lectura de la obra no tiene por qué ser necesariamente secuencial ni completa.
- Es importante tener inicialmente una visión general del contenido, objetivo que se logra con el Resumen General de la Obra y con el Resumen del Lenguaje.
- El lector que, a efectos prácticos, quiera conocer solo el lenguaje, puede ir directamente a la sección “Lenguaje MENTAL” y saltarse (o leer ligeramente) las secciones anteriores.
- Respecto a la sección “Aplicaciones”, los lectores puede centrarse en los de su mayor interés, ignorando el resto. Por ejemplo, un lector interesado en informática le interesarán lógicamente las aplicaciones informáticas, y se saltará el resto de las aplicaciones.
- Las secciones “Propiedades”, “Unión de Opuestos” y “Comparaciones” permiten profundizar en el lenguaje. Aquí también los lectores se pueden centrar en los capítulos de su mayor interés.
Agradecimientos
- A mi constelación de familia y amigos por su interés y apoyo moral. Estoy agradecido especialmente a mi hermano Pepe (ya fallecido) –junguiano convencido y a quien considero mi mentor intelectual– por sus orientaciones y consejos. Sin su influencia y su conocimiento en especial, el concepto de arquetipo que juega un papel clave en este trabajo, probablemente esta obra no habría sido escrita.
- A las siguientes personas de la Facultad de Informática de la Universidad Politécnica de Madrid:
- Los profesores Rafael Gonzalo Molina y Valentín Palencia Alejandro, por su apoyo incondicional para que la tesis llegara a buen puerto.
- Darío Maravall, director del Departamento de Inteligencia Artificial cuando se presentó la tesis, también por su apoyo y confianza.
- Cada uno de los miembros del tribunal que juzgó la tesis, por su valoración. En especial al presidente, el catedrático Luis Laita de la Rica.
- A Pablo Rubio Pérez, ingeniero de profesión y matemático de vocación, por sus comentarios y sugerencias sobre MENTAL, así como por transmitirme su descubrimiento del teorema de Pitágoras generalizado para objetos multidimensionales.
- A José Ignacio Sánchez Andrés, profesor de matemáticas, por sus comentarios y observaciones de tipo matemático y universalista.
- A mis sobrinos David Rodríguez-Roselló Torres e Iván Rodríguez-Roselló Muñoz, por sus consejos sobre la estructura de mi web. David me facilitó el alojamiento para mi web.
- Mi agradecimiento a todos los autores que me han precedido. Debo destacar especialmente la influencia de Platón, Kant, Frege, Wittgenstein, Russell, Turing, Gödel, Jung y Chomsky.
- Finalmente, mi agradecimiento a una tecnología universalista, Internet, sin la cual esta obra habría sido imposible de escribir.